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Comunicado de prensa

15 Historiadores desmienten la alegación de inmunidad del expresidente en el caso Trump v. US

Entre las personas firmantes del escrito figuran Holly Brewer, Rosemarie Zagarri, Jack Rakove y otras figuras académicas de renombre nacional. Estos historiadores demuestran que la historia no respalda la inmunidad procesal del presidente.

Abril 8, 2024
Contact: Sophia Lee, Media Contact, leesophia@nyu.edu, 646-925-8734

Un grupo de historiadores ha presentado un escrito de amicus curiae (amigos de la corte) ante la Corte Suprema en el caso Trump v. United States. Estos historiadores, entre los que se encuentran Holly BrewerRosemarie Zagarri y Jack Rakove, rechazan la alegación de inmunidad de todo procesamiento judicial del expresidente. Encuentran que la rendición de cuentas ante la ley ha sido un principio definitorio del cargo de presidente de los Estados Unidos desde sus orígenes.

“Cuando diseñaron el cargo de la presidencia, los fundadores de nuestra nación no querían ningún elemento de inmunidad de procesamiento penal que ostentaban los reyes de Inglaterra”, afirmó Brewer, presidenta “Burke” de Historia Cultural e Intelectual Estadounidense y profesora asociada de Historia en la Universidad de Maryland.

“Esa inmunidad era un aspecto central de lo que ellos veían como un sistema defectuoso. Tanto a nivel estatal como nacional, redactaron constituciones que obligaban a todos sus líderes, incluso al presidente, a rendir cuentas ante las leyes del país. St. George Tucker, uno de los jueces más prominentes de la nueva nación, estableció el principio con claridad: todo el mundo tiene la misma obligación de cumplir con la ley, desde ‘un mendigo en la calle’ hasta el presidente”.

En su escrito presentado ante la Corte, el grupo de historiadores demuestra cómo los presuntos delitos de Trump son una violación particularmente atroz a los principios fundacionales de la democracia estadounidense. 

“Los fundadores de la nación discutían sobre muchas cosas, pero todos creían con unanimidad que el presidente no debía ser un rey”, indicó Zagarri, profesora universitaria distinguida y profesora de Historia en la Universidad George Mason.

“Crearon un proceso electoral que era independiente del poder ejecutivo, en parte para asegurarse de que la persona que ocupa la presidencia no pueda manipular el proceso. Ahora tenemos a un expresidente que está rompiendo con el molde que crearon nuestros fundadores, porque alega gozar del privilegio de tener inmunidad procesal —un privilegio que antes solo tenía la monarquía británica— para salvarse de un juicio por haber intentado revertir los resultados de una elección que perdió”. 

Los historiadores demuestran cómo el principio de que el presidente no está por encima de la ley ha estado vinculado con otros principios democráticos básicos a lo largo de la historia de nuestra democracia.

“La alegación del expresidente Trump de que puede intentar anular los resultados de una elección sin enfrentar las consecuencias es profundamente antiestadounidense”, afirmó Thomas Wolf, uno de los abogados defensores de la causa y director de las Iniciativas Democráticas para el Programa sobre Democracia del Brennan Center for Justice en la Facultad de Derecho de NYU.

“Desde el nacimiento de nuestro país hasta la aceptación de un acuerdo de culpabilidad del expresidente Clinton en 2001, se ha entendido que los presidentes pueden ser procesados penalmente. La Corte Suprema no puede demorarse más y debe dictar su resolución en esta causa”.

Siete de los quince historiadores que firmaron el escrito integran el Consejo de Historiadores sobre la Constitución del Brennan Center. La firma jurídica Friedman Kaplan Seiler Adelman & Robbins LLP y el Brennan Center for Justice son partes defensoras del caso que también presentaron el escrito.

El equipo de historiadores que presentó el escrito está compuesto por:

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Contacto para la prensa en español: Mireya Navarro, mireya.navarro@nyu.edu